Etiquetas

, , , , , , , , , , ,

Escuela de Turismo de Lanzarote

Esta mañana he tenido dos actos directamente relacionados con el mundo del turismo, una charla-debate con los alumnos de la Escuela Universitaria de Turismo de Lanzarote y la entrega del sello de calidad Q al Grupo Pérez Moreno y su filial Relaxia. Dos actos realmente interesantes porque nos pueden servir para representar los proyectos y realidades de este sector estratégico, el primero en la economía de Canarias.

Los proyectos que tenemos para el turismo son muchos, y todos ellos relacionados con aspectos claves de mejora en base a la excelencia, la calidad, la sostenibilidad, la rehabilitación, la modernización y, en un lugar también destacado, la formación. Vengo reptiendo desde hace tiempo que, en un lugar como Canarias en que no necesitamos reclamos artificiales para atraer turistas, los esfuerzos han de centrarse en lo que los canarios y las canarias podamos hacer para que nuestro destino sea único, líder en el mundo, y eso pasa por los factores que acabo de mencionar.

Disponer de buenos profesionales es un asunto de la máxima importancia, pues de poco nos vale recibir esos millones de visitantes si no quedan satisfechos con el servicio que se les ofrece, con el trato, es decir con la profesionalidad. Igual que los ganamos, lo perderemos, porque nadie repite visita a un lugar en el que no ha sido bien tratado.

En ese sentido, tanto desde la esfera pública, como la privada, se están realizando numerosos esfuerzos encaminados a potenciar y mejorar la formación de los profesionales del sector. El pasado sábado, sin ir más lejos, presidía la inauguración de la Escuela Superior de Cocina y Restauración Microsistemas de Arrecife, una importante apuesta en el ámbito privado para elevar el nivel de los trabajadores de hoteles, bares y restaurantes. Hoy, esa Escuela de Turismo enclavada en Tahíche donde he podido contrastar el interés, la preocupación y la dedicación de los estudiantes por la mejora en el sector.

Mantuve una charla muy intensa con ellos, abordando temas de muy distinta índole, pero todos con el turismo y la formación como ejes. Preguntas y opiniones todas muy interesantes porque reflejaron esa implicación con su futuro laboral, imprescindible para el cometido que tenemos por delante. Ellos son proyectos de futuro, de un futuro formado y preparado para que no volvamos a caer en los errores del pasado y sedimentar una actividad sostenible que empuje del resto de la economía de las Islas y garantice, a su vez, la diversificación.

Pero en el turismo también hay realidades. Afortunadamente muchas y cada vez mejores. La primera y más relevante: que la recuperación es ya todo un hecho. Hoy mismo se hacía público que Canarias ha sido el destino turístico con mayor ocupación en febrero, nada menos que un 81,9%, seguida de Madrid con un 59,7% y de Baleares con un 45,3%. Pero no es sólo ese dato parcial. Las reservas de cara al verano son ya del orden del 14% superiores a las del verano de 2010, y la expectativas para la próxima temporada de invierno son también impresionantes. Estamos ante un crecimiento sostenido, derivado en gran medida de la bajada de las tasas aéreas que negociamos con Madrid, y no ante una mejora coyuntural como algunos se empeñan en decir.

Pero hay más. No basta con la cantidad, como señalaba anteriormente. Aunque es importante, nuestra puesta ha de ir orientada la máxima calidad. Y aquí también hay realidades. Realidades como la puesta en marcha en breve del Plan de Modernización de Puerto del Carmen, y de Costa Teguise, Corralejo, Morro Jable, Sur de Gran Canaria, Puerto de la Cruz, Santiago del Teide, la Isla Baja en Tenerife, también en La Palma…

Y realidades como la apuesta por las energía limpias y el horizonte de emisiones cero de CO2 para 2020, la conciencia de sostenibilidad cada vez más creciente entre nuestra gente. Pero esa sostenibilidad de la que he hablado en otras ocasiones, una sostenibilidad integral, convencida: sostenibilidad económica, social, medioambiental, cultural, demográfica, territorial, gastronómica…

Y realidades como la que hoy nos presentaba el Grupo Pérez Moreno: una apuesta por la mejora y la excelencia, con la reapertura de las instalaciones de Relaxia mejoradas y comprometida con las energías limpias (todo el sistema eléctrico de sus complejos se abasteden de energía fotovoltaica) y su proyecto de implantar el sistema de protección medioambiental Hoteles de la Biosfera, como un paso más hacia ese gran objetivo que es convertir Canarias en referente de turismo de calidad, con todo lo que eso significa, y líder a escala mundial.

Tenemos unas condiciones únicas. Sólo depende de nosotros conservarlas, mejorarlas y dotarlas de medios y profesionales. Por eso tenemos tantos proyectos entre manos. Y, por eso también, comenzamos a constatar realidades fruto del esfuerzo de los empresarios comprometidos y de las instituciones públicas.