Esta semana ha tenido lugar en Londres la World Travel Market, una de las principales ferias turísticas a nivel internacional junto a la ITB de Berlín y Fitur en Madrid. Como en años anteriores, el destino Islas Canrias ha vuelto a brillar.
Nuestro stand recibía uno de los premios de la organización, en concreto al ‘Mejor stand para hacer negocios‘, un reconocimiento al trabajo continuo y constante de todos los profesionales que componen Turismo de Canarias Promotur, auténtico referente de la promoción turística en los últimos años.
Esto ocurría en un mercado, el británico, que es el primero en número de pasajeros, con cuatro millones de turistas de los trece millones que nos visitaron el pasado año y que, lejos de tener un techo, vemos con satisfacción cómo no solo repiten, sino que su número sigue creciendo.
Durante cuatro días, la capital británica se ha convertido en la capital mundial del turismo, y es que todos los operadores, desde los propios destinos hasta las empresas de tecnología –pasando claro está por las ofertas de alojamiento, de ocio, turoperadores o líneas aéreas–, se daban cita de lunes a jueves para empezar el año turístico 2015-2016 o cerrar el 2014-2015. En cualquier caso, cita obligada para nuestros empresarios y nuestras islas.
La cita de Londres se cierra un año más con datos muy positivos para Canarias. Las cifras para este invierno muestran un incremento de 199.669 plazas aéreas, lo que supone un 11,4 por ciento más que la temporada anterior. Pero además, se conocía el dato de la venta anticipada de paquetes turísticos para el próximo verano, que también arroja un dato positivo. Aunque no olvidemos que no es aun el principal momento de compra del británico de cara al verano, algo que suele ocurrir a mediados de enero. Pero en cualquier caso, son datos positivos que animan a seguir trabajando como se ha hecho en los últimos años, con rigor y profesionalidad en materia turística.
Si a estos datos le sumamos los anuncios hechos por algunas compañías aéreas que incrementarán su capacidad para el próximo verano, podemos estar esperanzados, que no confiados, de cara a 2016.
La prudencia es siempre una virtud, y en el sector turístico más si cabe, pues son muchos los factores que inciden en su marcha. Por eso creo que debemos seguir apostando por la mejora de nuestra oferta, de nuestras zonas turísticas y de nuestros establecimientos hoteleros y extrahoteleros. Pero también de la oferta de ocio y restauración. En definitiva, debemos continuar esforzándonos por hacer las cosas mejor que nuestros competidores para seguir siendo líderes.
Fotografía: Promotur